UNA CIUDAD JUSTA Y DEMOCRATICA
20 de junio de 2008
Miguel Antonio Bernal
Candidato a Alcalde de la capital
Dos Panamá cohabitan en esta aspirante a metrópoli: el Panamá que concentra renta y poder y el Panamá dónde la pobreza y la miseria confirman la creciente desigualdad. El Panamá en que algunos, envueltos en ostentosos privilegios que les brindan ciertos cargos o el monopolio se hacen de los espacios más y mejor valorizados y, el otro Panamá, en el que las aguas negras sirven de jardines en viviendas precarias y en los que el agua llega de vez en cuando, sin servicios sanitarios ni de salud, con la escuela distante y el transporte inadecuado.
Es así como la propuesta que avanzamos con nuestro equipo de trabajo en la campaña por
Se impone una pronta elevación de la calidad de vida de la población en un Municipio verdaderamente saludable y equitativo, para lo cual es urgente y obligatorio una política enfocada en la comunidad y sus auténticas necesidades, más que en la figura de quien regenta el cargo. En otras palabras, requerimos de mayor participación ciudadana. Un trabajo para y con la comunidad.
Ello conlleva, necesariamente la implementación de un sistema impositivo municipal justo y equilibrado, que permita una distribución equitativa de los recursos que se genera en el mismo; así como la implementación de servicios focalizados de atención a los sectores más deprimidos de la población en materia de educación, salud, transporte, seguridad y vivienda a nivel del Distrito Capital.
Es necesario, por ejemplo, una estrategia participativa para mejorar los sistemas de prevención de salud y la promoción para garantizar el acceso universal a los servicios de atención, modificando los factores condicionantes, con el compromiso de priorizar la seguridad y salud ciudadana en todas las acciones e iniciativas del Municipio.
La elaboración y ejecución de un proyecto educativo y habitacional que comience a través de campañas cívicas, por la erradicación del analfabetismo a nivel distrital, basada en la responsabilidad para con nuestro entorno y nuestros semejantes. Esto, acompañado de la participación en el diseño y ejecución de programas educativos de los organismos públicos y privados que desarrollan actividades de investigación aplicada, ciencia y tecnología en el municipio capitalino.
En otra ocasión, trataré sobre el desarrollo de una política que permita establecer un sistema de espacios públicos y áreas verdes urbanas y una normativa municipal para controlar el ruido y la contaminación.
NOTA: Aunque apareció en un diario local, este artículo se pública con la autorización de su autor.
Miguel Antonio Bernal es catedrático en la Universidad de Panamá
y aspirante independiente a la Alcaldía de la ciudad de Panamá.
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